Pero en esa terraza, ese día ocurrirá mucho más que eso.
Estas amigas, tan diversas como unidas representaran el
complejo mundo femenino, tan frívolo como existencial, ellas comenzarán a soñar
con un viaje al Caribe al cual por el momento les resulta imposible
acceder. Pertenecientes a una clase
media venida a menos, en la década de los noventa, estas seis mujeres han
quedado afuera de la fiesta menemista.
Es un día en pleno verano y con un sol que raja la tierra,
la terraza se convierte en su paraíso terrenal, hasta hoy. Gustavo Taretto logra a través de sus
personajes, y en una película que parece sencilla pero no lo es, retratar la
lucha por conseguir los sueños, la amistad, la lealtad y como el todo es más
que la suma de las partes.
La magia de la película se da en la revelación del universo
femenino, con mujeres tan estereotipadas como reales y para eso la clave fue
encontrar un elenco variopinto y talentoso -conformado por Carla Peterson,
Luisana Lopilato, Marina Bellati, Elisa Carricajo, Maricel Álvarez y Violeta Urtizberea-
que lograron una química que traspasa la pantalla. Mujeres al desnudo, con sus virtudes y sus
miserias, las hay mas calladas, la tímida, la que se victimiza, la que quiere
llamar la atención, la que lleva batuta, la esotérica; todo está ahí, en esa
terraza y en un ritual que se lleva a cabo cada semana, pero que esa tarde será
distinto.
Las insoladas es una película fresca y divertida que
reflexiona sobre la búsqueda de nuestros sueños y que estamos dispuestos a
hacer para conseguirlos. ¿Vamos a tomar
sol?
No hay comentarios:
Publicar un comentario